por más que lo repitamos
amor, amor, amante, amamos
no estarán en nuestras manos
sino, a su servicio, los humanos
cuando de verdad amemos
o el amor embargue y calme
no rendiré más culto a las palabras
tantas; tan pocas, escasas
huecas, caja de resonancia y ecos
para convencernos
de lo que aún ni sintamos,
ni tendremos, ni tenemos
el primer fracaso
y el último, acaso
querer comprenderlo
encerrarlo en vil concepto
fundamento, mente y parapeto
la vibración hecho efecto
la causa tenida por defecto
trucados, truncados los elementos
por diversos razonamientos
del dios pagano hago fe y causa
y, por tanto, en el motor mundano
diluyo el divino atasco
fluyo, me dejo recorrer y mudo
sin decir nada, cornudo
feliz como en un embudo
infiel, engañado y crudo
la trompeta celestial mis huesos cruje
el alivio que en mi alma dibuje
terremoto terrenal aduje
la tempestad que en cielo y tierra ruge
deduje, induje, seduje
propuse, impuse, puse
¿anduve, retuve, hube?
por no dejarme hacer
ni tuve, ni contuve, ni mantuve
el amor que presumí nube
digo callo, callo escritos
cierro los ojos y miro
amor, amor, amamos
amigo, amante
desvanecido
digo que ya no digo
lunes, 18 de octubre de 2010
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Amo tu lucidez cuando de amor hablas.
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