ya no hay más remedio
que esperar el crugir de piedras
o aprender a volar
agitando las piernas
quizás, sólo quizás
fueran del motor, las manivelas
para amasar con tus manos
con las tuyas, sin ajenas
para quitarle las formas al miedo
que encierran en fantasmas, el espanto
celoso de tu cuerpo hermoso
ajado por el llanto de tiempos remotos
debieron haber muerto solos
por inanición, o de desaliento
pero sus aristas aún te hacen llagas
muere, mata... calla o habla
pero vuela, en pos de tus alas
amansa tus demonios a gritos
te reconciliarás con el aliento fugitivo
reconócelo, está perdido
mira tu pecho, te necesita
late un corazón esquivo
déjale cabalgar altivo
sin meta, sin final; sin principios
sin objeto, ni objetivo
sin jinete atrapado en bocetos
sin riendas, sin estribos
cabalgar por cabalagar
agita, como agita
el corcel divino, sus herraduras
para quien en vez de ser hierro y lastre
son impulso cierto y fiero
¿crugir de piedras?
no temas, son tuyas
impúlsate sobre ellas
y galopa
saltando de estrella en estrella
rutilante, cuan centella bella
¿me concederías estos tres deseos?
¡oh genio de la botella!
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Y un baile? Entre piedras también es posible bailar.
ResponderEliminarUna vez alguien me hizo un cuento,
ResponderEliminarsobre un genio y tres deseos,
Fue un lindo cuento...debo buscar donde quedo..
• a volar se aprende, y también he aprehendido, que no hay vidas sin lloro ni vuelos sin agitarlas...y pues un deseo ya esta pedido y una deuda sin ser saldada si pues las alas prestas en pos de un sueño están ...que si la vida gira y un deseo mas…pedir se puede en el camino te he de encontrar
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