un velo, y su tul
de inmunidad impune
iluminado por el hado malvado
lo que separa no une
en torno a dos velas
mi grupo escaso, reune
y de las miradas ajenas cubre
hasta que el rayo de sol consume
¿será acaso acoso
el destello de luz
que no deja ver?
¿o en la oscuridad, tal vez
y no en lo que ves
pierda el deslumbramiento su parecer?
¿dónde estará la clave del misterio
del secreto que no es?
jueves, 3 de febrero de 2011
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Lo velado siempre parece más interesante. A veces nuestra mente no quiere descorrer velos, para continuar con el ensueño, que nos permita escapar de realidades que no deseamos. Como siempre haciendo pensar, Pensador de Sueños y Realidades, descorriendo velos.
ResponderEliminarBesos.
La mayor parte de las veces, el secreto y toooodos los velos del mundo están en nuestro propio interior.
ResponderEliminarEl problema es querer develarlos.
Besos.